viernes, 16 de enero de 2015

Segunda Guerra Mundial

Segunda Guerra Mundial


La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto militar global que se desarrolló entre 1939 y 1945. En él se vieron implicadas la mayor parte de las naciones del mundo, incluidas todas las grandes potencias, agrupadas en dos alianzas militares enfrentadas: los Aliados y las Potencias del Eje. Fue la mayor contienda bélica de la Historia, con más de cien millones de militares movilizados y un estado de «guerra total» en que los grandes contendientes destinaron toda su capacidad económica, militar y científica al servicio del esfuerzo bélico, borrando la distinción entre recursos civiles y militares. Marcada por hechos de enorme significación que incluyeron la muerte masiva de civiles, el Holocausto y el uso, por primera y única vez, dearmas nucleares en un conflicto militar, la Segunda Guerra Mundial fue el conflicto más mortífero en la historia de la humanidad,1 con un resultado final de entre 50 y 70 millones de víctimas.
El comienzo del conflicto se suele situar en el 1 de septiembre de 1939, con la invasión alemana de Polonia, el primer paso bélico de la Alemania nazi en su pretensión de fundar un gran imperio en Europa, que produjo la inmediata declaración de guerra de Francia y la mayor parte de los países del Imperio Británico y la Commonwealth al Tercer Reich. Desde finales de 1939 hasta inicios de 1941, merced a una serie defulgurantes campañas militares y la firma de tratados, Alemania conquistó o sometió gran parte de la Europa continental. En virtud de los acuerdos firmados entre los nazis y los soviéticos, la nominalmente neutral Unión Soviética ocupó o se anexionó territorios de las seis naciones vecinas con las que compartía frontera en el oeste. El Reino Unido y la Commonwealth se mantuvieron como la única gran fuerza capaz de combatir contra las Potencias del Eje en el Norte de África y en una extensa guerra naval. En junio de 1941 las potencias europeas del Eje comenzaron la invasión de la Unión Soviética, dando así inicio a la más extensa operación de guerra terrestre de la Historia, donde desde ese momento se empleó la mayor parte del poder militar del Eje. En diciembre de 1941 el Imperio del Japón, que había estado en guerra con China desde 19372 y pretendía expandir sus dominios en Asiaatacó a los Estados Unidos y a las posesiones europeas en el Océano Pacífico, conquistando rápidamente gran parte de la región.
El avance de las fuerzas del Eje fue detenido por los Aliados en 1942 tras la derrota de Japón en varias batallas navales y de las tropas europeas del Eje en el Norte de África y en la decisiva batalla de Stalin grado. En 1943, como consecuencia de los diversos reveses de los alemanes en Europa del Este, la invasión aliadade la Italia Fascista y las victorias de los Estados Unidos en el Pacífico, el Eje perdió la iniciativa y tuvo que emprender la retirada estratégica en todos los frentes. En 1944 los aliados occidentales invadieron Francia, al mismo tiempo que la Unión Soviética recuperó las pérdidas territoriales e invadía Alemania y sus aliados.
La guerra en Europa terminó con la captura de Berlín por tropas soviéticas y polacas y la consiguiente rendición incondicional alemana el 8 de mayo de 1945. La Armada Imperial Japonesa resultó derrotada por los Estados Unidos y la invasión del Archipiélago japonés se hizo inminente. Tras el bombardeo atómico sobre Hiroshima y Nagasaki por parte de los Estados Unidos y la invasión soviética de Manchuria, la guerra en Asia terminó el 15 de agosto de 1945 cuando Japón aceptó la rendición incondicional.


La Gran Depresión Económica Después  de la Primera Guerra Mundial


El efecto de la Primera Guerra Mundial sobre la economía es causa de múltiples polémicas ya que, como todo análisis histórico y económico, está profundamente ligado a la ideología política. En cualquier caso, casi todo el mundo coincide en que ésta ocasionó grandes convulsiones que marcan el final de una época (hegemonía indiscutible de Europa), y el inicio de una transición hacia un nuevo orden mundial que se consolidaría con la Segunda Guerra Mundial. Muchos autores ven en la Gran Depresión una consecuencia directa de la magnitud de los cambios que se produjeron.
La preparación del conflicto bélico y, especialmente, su ejecución supusieron un incremento de los gastos militares. Las estimaciones elevan la cifra de gastos entre 260.000 y 338.000 millones de dólares de la época.1 Para hacer frente a estos gastos extraordinarios, se recortó el capital.
En el Reino Unido, Alemania y Francia la financiación de las acciones bélicas no fue cubierta con los ingresos de carácter ordinario.1 La gran mayoría de los gobiernos se endeudaron fuertemente, hasta extremos insospechados hasta entonces, recurriendo a campañas propandísticas de carácter patriótico y se generaron fuertes presiones inflacionistas. La estrategia financiera estaba dirigida hacia la victoria militar que iría seguida por indemnizaciones millonarias de los derrotados.
El tejido productivo se orientó a la producción de armamento, de forma que los bienes de consumo empezaron a ser escasos. Todo tuvo un impacto muy negativo sobre los estratos más pobres de la sociedad, causando numerosas revueltas, como la Revolución rusa.

Desarrollo de la Segunda Guerra Mundial


La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto militar global que se desarrolló entre 1939 y 1945. En él se vieron implicadas la mayor parte de las naciones del mundo, incluidas todas las grandes potencias, agrupadas en dos alianzas militares enfrentadas: los Aliados y las Potencias del Eje. Fue la mayor contienda bélica de la Historia, con más de cien millones de militares movilizados y un estado de «guerra total» en que los grandes contendientes destinaron toda su capacidad económica, militar y científica al servicio del esfuerzo bélico, borrando la distinción entre recursos civiles y militares. Marcada por hechos de enorme significación que incluyeron la muerte masiva de civiles, el Holocausto y el uso, por primera y única vez, dearmas nucleares en un conflicto militar, la Segunda Guerra Mundial fue el conflicto más mortífero en la historia de la humanidad,1 con un resultado final de entre 50 y 70 millones de víctimas.
El comienzo del conflicto se suele situar en el 1 de septiembre de 1939, con la invasión alemana de Polonia, el primer paso bélico de la Alemania nazi en su pretensión de fundar un gran imperio en Europa, que produjo la inmediata declaración de guerra de Francia y la mayor parte de los países del Imperio Británico y la Commonwealth al Tercer Reich. Desde finales de 1939 hasta inicios de 1941, merced a una serie defulgurantes campañas militares y la firma de tratados, Alemania conquistó o sometió gran parte de la Europa continental. En virtud de los acuerdos firmados entre los nazis y los soviéticos, la nominalmente neutralUnión Soviética ocupó o se anexionó territorios de las seis naciones vecinas con las que compartía frontera en el oeste. El Reino Unido y la Commonwealth se mantuvieron como la única gran fuerza capaz de combatir contra las Potencias del Eje en el Norte de África y en una extensa guerra naval. En junio de 1941 las potencias europeas del Eje comenzaron la invasión de la Unión Soviética, dando así inicio a la más extensa operación de guerra terrestre de la Historia, donde desde ese momento se empleó la mayor parte del poder militar del Eje. En diciembre de 1941 el Imperio del Japón, que había estado en guerra con China desde 19372 y pretendía expandir sus dominios en Asiaatacó a los Estados Unidos y a las posesiones europeas en el Océano Pacífico, conquistando rápidamente gran parte de la región.
El avance de las fuerzas del Eje fue detenido por los Aliados en 1942 tras la derrota de Japón en variasbatallas navales y de las tropas europeas del Eje en el Norte de África y en la decisiva batalla de Stalingrado. En 1943, como consecuencia de los diversos reveses de los alemanes en Europa del Este, la invasión aliadade la Italia Fascista y las victorias de los Estados Unidos en el Pacífico, el Eje perdió la iniciativa y tuvo que emprender la retirada estratégica en todos los frentes. En 1944 los aliados occidentales invadieron Francia, al mismo tiempo que la Unión Soviética recuperó las pérdidas territoriales e invadía Alemania y sus aliados.
La guerra en Europa terminó con la captura de Berlín por tropas soviéticas y polacas y la consiguienterendición incondicional alemana el 8 de mayo de 1945. La Armada Imperial Japonesa resultó derrotada por los Estados Unidos y la invasión del Archipiélago japonés se hizo inminente. Tras el bombardeo atómico sobre Hiroshima y Nagasaki por parte de los Estados Unidos y la invasión soviética de Manchuria, la guerra en Asia terminó el 15 de agosto de 1945 cuando Japón aceptó la rendición incondicional.
La guerra acabó con una victoria total de los Aliados sobre el Eje en 1945. La Segunda Guerra Mundial alteró las relaciones políticas y la estructura social del mundo. La Organización de las Naciones Unidas(ONU) fue creada tras la conflagración para fomentar la cooperación internacional y prevenir futuros conflictos. La Unión Soviética y los Estados Unidos se alzaron como superpotencias rivales, estableciéndose el escenario para la Guerra Fría, que se prolongó por los siguientes 46 años. Al mismo tiempo declinó la influencia de las grandes potencias europeas, materializado en el inicio de la descolonización de Asia yÁfrica. La mayoría de los países cuyas industrias habían sido dañadas iniciaron la recuperación económica, mientras que la integración política, especialmente en Europa, emergió como un esfuerzo para establecer las relaciones de posguerra.


Fin de la Segunda Guerra Mundial 



La segunda guerra mundial fue uno de los peores episodios por los que ha tenido que pasar la humanidad.
Las principales consecuencias fueron la crisis social, la crisis económica, los millones de personas que murieron, las crisis morales, etc.
Finalmente, el 9 de Mayo de 1945 se anunciaba el final de la guerra, después de cinco años, ocho meses y siete días de batalla.
A diferencia de la primera guerra mundial, en la que los Estados Unidos optaron por el aislamiento, al finalizar la segunda guerra mundial, asumieron la responsabilidad de una política de intervención en conflictos como primera potencia mundial.
Los Estados Unidos, aplicando la "Doctrina Truman" (tratar de frenar la expansión del comunismo y de la Unión Soviética), lanzaron el conocido "Plan Marshall" para ayudar económicamente a los países europeos. Una condición básica para recibir ayudas por parte de los americanos era la adopción de una política de libre comercio.
Este plan tenía como objetivo ayudar económicamente a los países más perjudicados de Europa tras la guerra.
Por tanto, en 1948 creó la Organización para la Cooperación Económica Europea (OECE) que ayudó a liberalizar el comercio entre los estados miembros, introduciendo acuerdos monetarios y ayudando a la cooperación económica.
Un año después, los Estados Unidos junto a la mayoría de los estados democráticos de Europa fundaron la OTAN, alianza militar occidental enfrentada a la Unión Soviética.
También se creó el Consejo de Europa, organismo cuyo objetivo es el de fomentar la cooperación política entre los países europeos. Su principal función ha sido y sigue siendo la de reforzar el sistema democrático y los derechos humanos en los estados miembros. 

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Primera Guerra Mundial (Unidad 3)

Primera Guerra Mundial

La Primera Guerra Mundial, también conocida como Gran Guerra, fue una guerra desarrollada principalmente en Europa, que dio comienzo el 28 de julio de 1914 y finalizó el 11 de noviembre de 1918, cuando Alemania pidió el armisticio y más tarde el 28 de junio de 1919, los países en guerra firmaron el Tratado de Versalles. Hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, esta guerra era llamada Gran Guerra o simplemente Guerra Mundial. En Estados Unidos originalmente se la conoció como Guerra Europea. Más de 9 millones de combatientes perdieron la vida, una cifra extraordinariamente elevada, dada la sofisticación tecnológica e industrial de los beligerantes, con su consiguiente estancamiento táctico. Está considerado el quinto conflicto más mortífero de la historia de la Humanidad. Tal fue la convulsión que provocó la guerra, que allanó el camino a grandes cambios políticos, incluyendo numerosas revoluciones con un carácter nunca antes visto en varias de las naciones involucradas.10
Recibió el calificativo de mundial, porque en ella se vieron involucradas todas las grandes potencias industriales y militares de la época, divididas en dos alianzas opuestas. Por un lado se encontraba la Triple Alianza, formada por las Potencias Centrales: el Imperio alemán y Austria-HungríaItalia, que había sido miembro de la Triple Alianza junto a Alemania y Austria-Hungría, no se unió a las Potencias Centrales, pues Austria, en contra de los términos pactados, fue la nación agresora que desencadenó el conflicto. Por otro lado se encontraba la Triple Entente, formada por el Reino UnidoFrancia y el Imperio ruso. Ambas alianzas sufrieron cambios y fueron varias las naciones que acabarían ingresando en las filas de uno u otro bando según avanzaba la guerra: Italia, Japón y Estados Unidos se unieron a la Triple Entente, mientras el Imperio otomano y Bulgaria se unieron a las Potencias Centrales (Triple Alianza). En total, más de 70 millones de militares, incluyendo 60 millones de europeos, se movilizaron y combatieron en la guerra más grande de la historia.


Inicio del conflicto Bélico


El recurso de la guerra ha sido continuamente usado a lo largo de la historia humana con el pretexto de ser el único remedio cuando la resolución de los conflictos por la vía política fracasa.
Durante la Primera Guerra Mundial se creó una nueva tecnología para perfeccionar e inventar máquinas e instrumentos para la destrucción. La guerra ocupó el aire, el mar y la tierra y, sobre todo en Europa, puso en movimiento a grandes masas de hombres y mujeres, quienes abandonaron sus actividades cotidianas para concentrarse sólo en el conflicto. A partir de entonces, cambió el papel de las mujeres en la vida social.

La disputa serbio-austriaca
Austria quería evitar que Serbia se convirtiera en líder del grupo de los estados balcánicos y, por las amenazas de los movimientos nacionales que buscaban la independencia, luchaba por mantener su situación de imperio multinacional y multilingüe. Después del asesinato del príncipe Francisco Fernando y su mujer, el gobierno austriaco consultó la delicada situación con Alemania, su aliada. Ésta le dio carta blanca, o sea, le aseguró brindarle su apoyo incondicional para que mantuviera su hegemonía en la zona.
Austria-Hungría le envió a Serbia un ultimátum de 48 horas, por el cual le exigió reprimir las acciones llevadas a cabo contra el Imperio, permitir que la policía austriaca investigara el magnicidio y castigar a los responsables. Por su parte, Serbia, que no estaba dispuesta a ir a la guerra, trató de arreglar el conflicto de la manera más conciliadora, pero alegó que las medidas que se le querían imponer violaban su soberanía.
La respuesta serbia le pareció insuficiente a Austria-Hungría. Acto seguido, el gobierno imperial rompió relaciones con Serbia y los militares austriacos se movilizaron. Por otro lado, el asunto les preocupó a los británicos, quienes tenían intereses en toda esta área geográfica por ser la conexión con Asia y el Medio Oriente. Los alemanes, quienes sí se preparaban para una guerra mayor, encontraron todo esto conveniente para ubicarse territorialmente mejor.
La situación también fue aprovechada por Rusia, la cual decidió apoyar a Serbia. De tiempo atrás, Alemania quería detener la expansión rusa a expensas de Austria y Turquía. Los gobiernos alemán y británico intercedieron para resolver el conflicto, pero no fue posible. Las flotas navales británica y alemana se concentraron en aguas territoriales en una visible confrontación. Con el afán de prevenir una intervención europea mayor, Austria le declaró la guerra a Serbia el 28 de julio de 1914.
El estallido del conflicto
Al día siguiente de haberle declarado Austria la guerra a Serbia, Rusia ordenó la movilización de sus tropas. Los alemanes le exigieron a los rusos que retiraran esta orden, pero ellos no lo hicieron. Alemania proclamó el peligro de guerra inminente y desplegó su ejército. Francia, como reacción contra su vecino, lo hizo así también. Alemania había previsto la necesidad de conquistar rápidamente a Francia, o sea, su frente occidental, para poder lanzarse contra los rusos antes de que éstos pudieran organizarse militarmente.
El 2 de agosto de 1914, Alemania le pidió al intromisión, pero los alemanes, violando la neutralidad belga, avanzaron. Esta agresión hizo que Gran Bretaña le exigiera a Alemania respetar a Béligca, lo cual equivalió a una declaración de guerra. En los días siguientes hubo un intercambio de declaraciones de guerra: Serbia a Alemania, Austria-Hungría a Rusia y Francia e Inglaterra a Austria-Hungría.
Al conocer la situación en Europa, Japón vio la oportunidad de ocupar las concesiones alemanas en China y de ampliar su zona de influencia desde el norte de China hasta el río Yang Tsé.
En unas cuantas semanas, el conflicto bélico se había extendido. Su duración sería mayor a los cuatro años (51 meses), del 4 de agosto de 1914 al 11 de noviembre de 1918. empezaban 31 años de guerra mundial, puesto que la Segunda Guerra sería la continuación de ésta.
Lo que había comenzado como un problema local entre Austria y Serbia se había convertido en una conflagración que se desplegaría por todos los océanos e involucraría al Medio Oriente, a una parte de África y Asia, a América y, por supuesto, a toda Europa. Las principales acciones bélicas se llevarían a cabo en los Balcanes y el océano Atlántico, a poca distancia de las islas británicas.
Según cálculos aproximados, la Primera Guerra Mundial –también llamada la Gran Guerra- tuvo un costo final de 10 millones de muertos en los campos de batalla, 20 millones de heridos graves o lisiados, cinco millones de huérfanos y 10 millones de refugiados.

La guerra en los frentes oriental y occidental.
El belicismo alemán respondía al proyecto del II Reich de buscar la unidad económica centroeuropea bajo su hegemonía. Alemania quería que este dominio irradiara como una estrella al este y al oeste, alcanzando desde Polonia al norte hasta Rumania al sur. Además, el II Reich quería ampliar sus posesiones coloniales y eliminar el dominio económico de la Gran Bretaña en el mar Mediterráneo, desde Marruecos hasta la India. Para ello, los alemanes promovían levantamientos nacionalistas entre los pueblos árabes.
Los planes expansionistas y anexionistas alemanes estaban motivados por una sobrevaloración de su potencia militar, por el nacionalismo y la creencia en su superioridad racial. Todo esto era promovido por los círculos de pangermanistas, los conservadores e incluso por una pequeña parte de los socialdemócratas.
Desde antes de la guerra, el conde Alfred von Schlieffen, jefe del Estado Mayor, había propuesto un plan de ataque en dos frentes: el oeste u occidental y el este u oriental.
A fines de agosto de 1914, en el frente occidental, Alemania había ocupado la mayor parte de Bélgica. Para septiembre se encontraba a poca distancia de París. A diferencia de lo ocurrido durante la Guerra –franco-prusiana, esta vez la contraofensiva francesa fue eficaz y el general Joffre logró detener el avance alemán con su victoria en la batalla del Marne.
A fines de octubre de 1914, las tropas franco-británicas y las alemanas se encontraron frente a frente en trincheras que habían sido cavadas en una larga línea que recorría desde el mar del Norte hasta la frontera con Suiza. Estas posiciones permanecerían así hasta el verano de 1918, variando sólo unos cuantos kilómetros en una dirección u otra. En las trincheras, los soldados pasaron meses o años enteros.


Armamentismo


En poco tiempo se diseñaron y crearon armas desconocidas hasta entonces y se perfeccionaron las empleadas en conflictos precedentes. Junto a éstas pervivió la tradición, evidenciada en el manejo de medios de transporte antiguos (caballerías) o el empleo de armas blancas como la bayoneta, útil en la lucha cuerpo a cuerpo en las trincheras.

Tras una primera fase de movimientos el conflicto evolucionó hacia la estabilización de los frentes dispuestos a lo largo de fosas excavadas en la tierra y túneles blindados de hormigón.
Es la denominada "guerra de trincheras" que dejó inmovilizados a millones de combatientes enfrascados durante meses en una lucha de desgaste que aunaba un alto índice de bajas y una profunda desmoralización.

El empleo de alambradas con espinos, armas químicas,ametralladoras y artillería de grueso calibre dejaba desvalida a la infantería en los ataques a las líneas enemigas.

Con frecuencia cundió el desánimo entre los combatientes, hecho que se tradujo en numerosos motines que los estados mayores abortaron empleando drásticas medidas represivas. Para contrarrestar la desmoralización causada por este tipo de guerra se empleó de forma masiva y sistemática la propaganda militar.



Repercusiones de la Primera Guerra Mundial 

Entre 1914 y 1918 se desarrolló la Primera Guerra Mundial, básicamente una contienda entre los distintos imperialismos, todavía de corte colonialista, y ante todo entre el imperio británico, que dominaba el planeta, y el naciente y agresivo imperio alemán, que pretendía abrirse paso. En 1917, en pleno fragor de esta confrontación, el proletariado ruso y las fuerzas patrióticas y democráticas, dirigidos por Lenin y su Partido Bolchevique, derrotaron la opresión del zarismo feudal y establecieron el régimen de los soviets, comités de obreros, campesinos y soldados.
Con el nacimiento de la Unión Soviética, en 1922, se fundó el primer Estado socialista de la Tierra, sistema bajo el cual la propiedad sobre los medios de producción pasa de ser privada a ser social y los productos creados se distribuyen con arreglo al trabajo, o sea que quien no trabaja, no come. El Estado responde por los servicios básicos de toda la sociedad como lo son la educación y la salud.
Sobre la grandeza histórica de la Revolución de Octubre, narra el escritor norteamericano John Reed lo siguiente:
Lejos de ser una fuerza destructiva, me parece que los bolcheviques eran en Rusia el único partido con un programa constructivo y capaz de imponer ese programa al país. Si no hubiesen triunfado en el momento en que lo hicieron, no hay apenas duda para mí de que los ejércitos de la Alemania imperial habrían entrado en Petrogrado y Moscú en diciembre, y de que un zar cabalgaría de nuevo sobre Rusia. (…)
Independientemente de lo que se piense sobre el bolchevismo, es innegable que la Revolución Rusa es uno de los grandes acontecimientos de la historia de la humanidad, y la llegada de los bolcheviques al poder, un hecho de importancia mundial. Así como historiadores se interesan por reconstruir, en sus menores detalles, la historia de la Comuna de París, del mismo modo desearán conocer lo que sucedió en Petrogrado en noviembre de 1917, el estado del espíritu del pueblo, la fisonomía de sus jefes, sus palabras, sus actos. Pensando en ellos, he escrito yo este libro.
Durante la lucha, mis simpatías no eran neutrales. Pero, al trazar la historia de estas grandes jornadas, he procurado estudiar los acontecimientos como unos cronistas concienzudos que se esfuerzan por reflejar la verdad.
Hecho tan trascendental repercutió en toda la estructura social y política del planeta. Nuestra nación no fue ajena a él, y a partir de esa fecha se avivan la organización y la lucha de los trabajadores de la ciudad y el campo.



















Inicios de La Industria Editorial (Imprenta)

Imprenta(inicios)

Hasta 1450 y aun en años posteriores, los libros se difundían en copias manuscritas por escritores, muchos de los cuales eran monjes y frailes dedicados exclusivamente al rezo y a la réplica de ejemplares por encargo del propio clero o de reyes y nobles. A pesar de lo que se cree, no todos los monjes copistas sabían leer y escribir. Realizaban la función de copistas, imitadores de signos que en muchas ocasiones no entendían, lo cual era fundamental para copiar libros prohibidos que hablasen de medicina interna o de sexo.[cita requerida] Las ilustraciones y las letras capitales eran producto decorativo y artístico del propio copista, que decoraba cada ejemplar que realizaba según su gusto o visión. Cada uno de sus trabajos podía durar hasta diez años.
En la Alta Edad Media se utilizaba la xilografía en Europa para publicar panfletos publicitarios o políticos, etiquetas, y trabajos de pocas hojas; para ello se trabajaba el texto en hueco sobre una tablilla de madera, incluyendo los dibujos —un duro trabajo de artesanía—. Una vez confeccionada, se acoplaba a una mesa de trabajo, también de madera, y se impregnaban de tinta negra, azul o roja (sólo existían esos colores). Después se aplicaba el papel y con rodillo se fijaba la tinta. El desgaste de la madera era considerable por lo que no se podían hacer muchas copias con el mismo molde. Este tipo de impresión recibe el nombre de xilografía.
Cada impresor fabricaba su propio papel, estampando una marca de agua a modo de firma de impresor. Por estas marcas de agua es por lo que se conocen sus trabajos.
En vez de usar las habituales tablillas de madera, que se desgastaban con el uso, confeccionó moldes en madera de cada una de las letras del alfabeto y posteriormente rellenó los moldes con plomo, creando los primeros tipos móviles. Tuvo que hacer varios modelos de las mismas letras para que coincidiesen todas entre sí: en total, más de 150 tipos, que imitaban la escritura de un manuscrito. Había que unir una a una las letras que se sujetaban en un ingenioso soporte, mucho más rápido que el grabado en madera y considerablemente más resistente al uso.Pidió dinero a Johann Fust, y comenzó su reto sin ser consciente de lo que su invento iba a representar para el futuro de toda la humanidad.En este entorno, Gutenberg apostó a que era capaz de hacer a la vez una copia de la Biblia en menos de la mitad del tiempo de lo que tardaba en copiar una el más rápido de todos los monjes copistas del mundo cristiano y que éstas no se diferenciarían en absoluto de las manuscritas por ellos.
Como plancha de impresión, amoldó una vieja prensa de vino a la que sujetó el soporte con los tipos móviles con un hueco para las letras capitales y los dibujos. Éstos, posteriormente, serían añadidos mediante el viejo sistema xilográfico y terminados de decorar de forma manual.
Lo que Gutenberg no calculó bien fue el tiempo que le llevaría poner en marcha su nuevo invento, por lo que antes de finalizar el trabajo se quedó sin dinero. Volvió a solicitar un nuevo crédito a Johann Fust y, ante las desconfianzas del prestamista, le ofreció formar una sociedad. Johann Fust aceptó la propuesta y delegó la vigilancia de los trabajos de Gutenberg a su sobrino, Peter Schöffer, quien se puso a trabajar codo a codo con él, al tiempo que vigilaba la inversión de su tío.
Tras dos años de trabajo, Gutenberg volvió a quedarse sin dinero. Estaba cerca de acabar las 150 Biblias que se había propuesto, pero Johann Fust no quiso ampliarle el crédito y dio por vencidos los anteriores, quedándose con el negocio y poniendo al frente a su sobrino, ducho ya en las artes de la nueva impresión como socio-aprendiz de Gutenberg.
Gutenberg salió de su imprenta arruinado y se cuenta que fue acogido por el obispo de la ciudad, el único que reconoció su trabajo hasta su muerte, pocos años después.
Peter Schöffer terminó el cometido que inició su maestro y las Biblias fueron vendidas rápidamente a altos cargos del clero, incluido el Vaticano, a muy buen precio. Pronto empezaron a llover encargos de nuevos trabajos. La rapidez de la ejecución fue sin duda el detonante de su expansión, puesto que antes la entrega de un solo libro podía posponerse durante años.
Actualmente, se conservan muy pocas "Biblias de Gutenberg" —o de 42 líneas— y, menos aún, completas. En España se conservan dos, una completa en Burgos4 y otra con sólo el Nuevo Testamento en Sevilla.5
La Biblia de Gutenberg no fue simplemente el primer libro impreso, sino que, además, fue el más perfecto. Su imagen no difiere en absoluto de un manuscrito. El mimo, el detalle y el cuidado con que fue hecho, sólo su inventor pudo habérselo otorgado.

Primeros impresos


Por otra parte, puesto que Hungría sería el primer reino que recibiría al renacimiento en Europa luego de Italia, y de esta forma bajo en reinado de Matías Corvino en el siglo XVI se inauguraría la primera imprenta húngara en 1472. Andrés Hess sería llamado a Hungría desde Italia, quien usando el sistema de Gutenberg organizaría la imprenta húngara y haría publicar dos obras: Cronica Hungarorum (La crónica de los húngaros), y el Magnus Basilius: De legendis poëtis - Xenophon: Apologia Socratis (dos obras griegas clásicas en un solo tomo).Según las declaraciones de diversos testigos[cita requerida] resulta que, mientras en apariencia fabricaba espejos, Gutenberg se servía de todos los instrumentos, materiales y herramientas necesarios para la secreta imprenta: plomo, prensas, crisoles, etc., con el supuesto pretexto de fabricar con planchas xilográficas de madera unos pequeños devocionarios latinos de título Speculum que eran fabricados en Holanda y Alemania con los títulos de Speculum, Speculum humanae salvationis, Speculum vitae humanae, Speculum salutis, etc. Pero algunos declararon que con el pretexto de imprimir espejos, "Gutenberg, durante cerca de tres años, había ganado unos 100 florines en las cosas de la imprenta."Gutenberg, en su labor de impresor, creó su famoso incunable Catholicon, de Juan Balbu de Janna. Pocos años después, imprimió hojas por ambas caras y calendarios para el año 1448. Además, junto a su amigo Fust editaron algunos libritos y bulas de indulgencia y en particular, aquel monumento de la imprenta primitiva, la Biblia de las 42 líneas, en dos tomos de doble folio, de 324 y 319 páginas respectivamente, con espacios en blanco para después pintar a mano las letras capitulares, las alegorías y viñetas que ilustrarían coloridamente cada una de las páginas de la Biblia.
Años más tarde y hacia 1500 la situación social cambiaba en Alemania y una guerra civil hizo que en Maguncia los impresores huyeran para evitar caer dentro de la guerra. A los impresores les costó mucho guardar el secreto y los talleres de imprentas se esparcieron por toda Europa.
La imprenta se conoce en América una vez concluida la conquista española. En 1539 el impresor Juan Crombergermonta una filial de su imprenta de Sevilla en Ciudad de México en un local de Juan de Zumárraga. Esta filial estará a cargo de Juan Pablos, que comienza su labor de impresión ese mismo año.6 El cronista Gil González Dávila ha querido decir que la primera obra impresa fue Escala espiritual para llegar al Cielo por San Juan Clímaco en 1532, en su versión traducida del latín por un fraile español, y aunque concuerda en el título del libro con el historiador Dávila Padilla, la fecha de 1532 es equivocada ya que en ese año no había medios para imprimir nada por aquellas tierras.6 El primer libro impreso sería Breve y más compendiosa Doctrina Christiana, escrito por Juan de Zumárraga, en la imprenta de Juan Cromberger gestionada por Juan Pablos en 1539.7
Así inició la más grande repercusión de la imprenta en la cultura de la humanidad. La palabra escrita ahora podía llegar a cualquier rincón, la gente podía tener acceso a más libros y comenzar a preocuparse por enseñar a leer a sus hijos. Las ideas cruzaban las fronteras y el arte de la tipografía fue el medio de difundirlas.
Libros, incunables, ediciones ilustradas con grabados de madera: la mejora de las técnicas y materiales de imprenta llevaron durante cuatro siglos las palabras por todo el mundo. El arte tipográfico evolucionó y llegó a crear obras maestras en la formación y estructuras de libros y ediciones especiales impresas. Actualmente las técnicas de impresión en calidad y volumen han mejorado de forma impresionante, algunas por medio de computadora, olvidándose del arte tipográfico que muchos tipógrafos del mundo se resisten a cambiar.
Pocos inventos han tenido la influencia en el ser humano como la creación de la imprenta, ese antiguo arte que, si va unido a una obra en labor del tipógrafo y a la obra escrita de un buen autor, proporciona una obra de arte completa, lista para conmover en belleza literaria y estética tipográfica al lector, el fin primero y último de la imprenta.
A finales del siglo XIX, se perfeccionó el proceso, gracias a la invención en 1885 de la linotipia, por Ottmar Mergenthaler.